Novedades Editoriales marzo 2015: ANAGRAMA - No Ficción

LA MARCA DEL EDITOR
Roberto Calasso
En una época de aplanamiento de las categorías, de fácil acceso a una supuesta biblioteca universal digitalizada (en verdad, fragmentaria y caótica), el editor tiende a ser visto como un intermediario innecesario entre el escritor y el lector. Este breve volumen de Roberto Calasso viene a rebatir punto por punto ese y otros graves errores de los adalides de la inmediatez, la velocidad y el rendimiento monetario como categorías absolutas.
 Apoyado en su excepcional situación, en el cruce entre el gran editor –dirige desde hace muchos años un sello italiano tan prestigioso como Adelphi, una referencia internacional– y el escritor de enorme cultura y agudeza crítica –por mencionar sólo sus últimos trabajos, ha escrito libros ya clásicos sobre Kafka, Baudelaire, Tiepolo y sobre la mitología hindú (todos ellos publicados por Anagrama)–, Calasso adopta una posición lúcida y comprometida, argumentada y avalada por su propia trayectoria. Al glosar la figura de los grandes editores europeos y estadounidenses del siglo XX, Calasso muestra la importancia decisiva que sellos como Gallimard, Einaudi, Suhrkamp o Farrar, Straus & Giroux han tenido en la formación de un criterio y un público lector, en el ordenamiento y la separación del grano de la paja en lo que a literatura se refiere.
Calasso argumenta su idea de «la edición como género literario»: un editor de la estirpe a la que él pertenece es un buscador de «libros únicos», es alguien que escribe, con los libros que publica, el mejor libro de todos: su catálogo, que es a la vez su autobiografía. Por eso, frente a la idea de quienes quieren manejar la edición como una industria cualquiera, este libro muestra, a la vez con finura y contundencia, la importancia del editor que defiende y cultiva su marca. Sin la cual todo se achata en una única categoría: la del entretenimiento fácil y el rápido olvido. No es un atractivo menor el recorrido que hace Calasso por su propia memoria, por las grandes personalidades con las que trató, no sólo del ámbito editorial, sino también, claro, del literario; en ese aspecto, es insuperable el retrato que traza aquí, por ejemplo, de Thomas Bernhard. La marca del editor puede leerse como una continuación de Cien cartas a un desconocido, el libro con el que, a través de los textos de las contracubiertas escritas para los libros de Adelphi, Calasso inauguraba sus memorias como editor. La marca del editor completa el trazado de una trayectoria excepcional, el de una estirpe que ha formado nuestra sensibilidad y nuestra cultura, y que ahora más que nunca necesita nuestro reconocimiento.

Roberto Calasso: (Florencia, 1941) reside en Milán. Es presidente y director literario de Adelphi, una de las editoriales de mayor prestigio internacional. En Anagrama ha publicado los ensayos recogidos en Los cuarenta y nueve escalones, las conferencias de La literatura y los dioses y los textos de Cien cartas a un desconocido, así como, y en especial, La ruina de Kasch, Las bodas de Cadmo y Harmonía, Ka, K., El rosa Tiepolo y ahora La Folie Baudelaire, seis magníficas obras que conforman una de las mayores empresas literarias de nuestro tiempo. Este nuevo libro de un autor de «una cultura inmensa» (Pietro Citati) confirma plenamente la afirmación de Leonardo Sciascia: "Sus obras están llamadas a no morir. Calasso es uno de los pocos escritores de raza que tenemos".

LA ESTETIZACIÓN DEL MUNDO
Vivir en la época del capitalismo artístico
Gilles Lipovetsky y Jean Serroy
La estetización del mundo de Lipovetsky y Serroy no es una obra de sociología corriente. Al igual que en La felicidad paradójica y en La pantalla global, volvemos a encontrarnos no con un ensayo parcial que aborda aspectos puntuales de la sociedad contemporánea, sino con una obra general, de gran aliento, con un fuerte contenido teórico, que viene a resumir las propuestas de obras anteriores, sin olvidar la tesis central del sociólogo parisino: la economía ya no se rige por el oportunismo de la oferta y la demanda, sino por una lógica basada en la dinámica de la moda: producción de mercancías crecientemente diferenciadas y renovadas y búsqueda de una parcelación del consumo que incremente los beneficios y las satisfacciones. En cierto modo es el fin que buscaba Piero Sraffa, el gran estudioso de David Ricardo: la producción de mercancías por medio de mercancías. La producción ya no impone, ensaya; la distribución no vende, seduce; y el consumo supera el estadio de la necesidad para conquistar el reino de la libertad. Los autores repasan multitud de procesos y aspectos: la evolución del comercio-espectáculo, la revolución del diseño, la fusión de arte y economía, el look, el empaquetado, el turismo cultural, lo kitsch, la dictadura de la belleza, los reality shows, los tatuajes, los ricos y famosos, el cine, la música portátil, la comida basura, Internet, las redes sociales. Ni que decir tiene que Lipovetsky y Serroy describen un estado ideal de cosas que en teoría reflejaría el funcionamiento perfecto de la democracia liberal. Saben que el capitalismo produce injusticias, diferencias económicas crecientes, y toneladas de basura y fealdad, pero no describen el peor aspecto del capitalismo, sino la mejor cara que podría tener. No todas las democracias son iguales. Sin perder de vista estas premisas, La estetización del mundo es un auténtico tratado de ética de la producción y el consumo que se convierte en ética estética precisamente porque los dos procesos tienden al mismo fin: la reproducción del mundo a la medida de nuestros deseos: es la felicidad paradójica del mejor de los mundos que puede ofrecer el capitalismo global que nos invade.

«Un ensayo brillante que detalla la historia de la democratización de los valores estéticos hasta nuestra época “hipermoderna”»
Alain-Gérard Slama
Le Figaro

«Su mayor mérito es hacernos comprender que el cálculo económico y la estetización general, lejos de contradecirse, hacen buenas migas. Y tienen además la inteligencia de no demonizar el hiperconsumo en nombre de la utilidad, de la seriedad, de una utopía austera e inflexible»
Le Monde

Gilles Lipovetsky: Sociólogo, es el autor de celebrados ensayos como La era del vacío, El imperio de lo efímero, El crepúsculo del deber, La tercera mujer, Los tiempos hipermodernos, La felicidad paradójica, La sociedad de la decepción y, con Jean Serroy, La pantalla global.

Jean Serroy: Escritor, crítico de cine y especialista en literatura medieval, Jean Serroy es profesor en la Universidad de Grenoble.
Su obra 1985- 2005: Entre deux siècles. 20 ans de cinéma contemporain, es considerada de referencia dentro del mundo de la crítica.
Además, Serroy ha publicado varios ensayos y artículos académicos sobre Molière o Corneille.